Bookafé es un lugar que
proporciona un ambiente familiar y agradable, donde usted puede
sentarse a disfrutar un café con aroma a Dios acompañado de unos
deliciosos pasabocas y contactar la palabra de Dios a través de los
libros espirituales.
Además tiene una sala de lectura y una
biblioteca con servicio de Interner wi-fi donde usted puede leer de
manera tranquila. Tambien cuenta con un lugar de Oracion donde puede ir a
orar con nosotros por las necesidades suyas y las de su familia.
En diversas ciudades de los países de
América del Sur, también en España, Italia, China y Corea ya se puede ir
a un Bookafé, un espacio preparado con cariño para recibir a las
personas. El nombre induce automáticamente a un significado: libros con
café. Podemos decir que, aparentemente eso es lo que la palabra quiere
decir. Sin embargo, esta palabra guarda un significado más profundo y
describe el sentir de sus creadores al idealizar un ambiente de lectura
abierto a todos los segmentos de la sociedad. Se trata de libros que
llevan a las personas a la Fe. Este es el verdadero objetivo del
Bookafé.
Las personas que entran se quedan
impresionadas con este proyecto. Hace unos días atrás, un profesor, un
periodista y un columnista de un importante periódico de Mossoró, dijo
que fue inundado por un sentimiento de paz al entrar al Bookafé. En el
artículo que reflexiona sobre el sentido de la vida, describe los
momentos que paso allí, y nos revela la satisfacción por la acogedora
recepción que tuvo. Abajo trascribimos parte de sus impresiones:
“Hace dos semanas estoy tratando de
comprender, por todos los ángulos, cual es el verdadero sentido de la
vida. Y en esta búsqueda por hallas una respuesta, he visto que, desde
todos los ángulos observados, lo que más tenemos sobre este asunto, son
significados adecuados pero únicamente para la vida material (…). Sin
embargo, no me di por satisfecho. Concluí que algo mas está faltando”.
Así que, hace una semana pase por una
cafetería recién inaugurada, algo me hizo entrar allí (…). Confieso que,
aunque el día estaba muy caluroso y el ruido del tránsito ensordecedor,
cuando pise ese lugar, una paz se apodero de mí, era algo agradable que
me invitaba a tomar una taza de café. Pude observar unos paneles y
estantes, estéticamente bien organizados con abundantes libros.
Estaba absorto, al mirar los títulos, cuando de repente un joven mesero
(que se trataba de un Colportor, una persona que difunde la Palabra
contenida en los libros), se acercó y me saludo muy cortésmente,
diciéndome que me sintiera a gusto (…). Mientras el café era preparado,
le pregunte al joven: para ti ¿Cuál es el sentido de la vida? El me miro
y dijo: amar a Dios (…), tomo un libro y me lo trajo. En seguida, me
pidió permiso y lo abrió en la página donde se habla del amor de Dios
por todos nosotros y como la vida tiene sentido cuando dejamos que El
entre en nuestro espíritu (…) y continuo: “el hombre busca en las cosas
materiales el sentido de una vida feliz, pero se olvida que tiene una
naturaleza pecaminosa, corrupta y maligna, que lo hace mentir, engañar,
robar, corromper y practicar la violencia en todos los niveles sociales.
Todo en nombre del lujo, del dinero, del poder y de la fama. Por fuera,
una vida ilusoria de riquezas; por dentro, un interior vacío y
miserable” (…). Termine de tomar café, le agradecí por las enseñanzas,
adquirí el libro y me retire con un poco más de comunión con mi espíritu
y, a través de él, pude sentir una leve brisa sobre mi cuerpo”.
Esta es una de las innumerables experiencias de las personas que han
entrado en los Bookafés y han leído los libros que ayudan a desarrollar
la fe en Dios. Querido lector, usted también está invitado a
entrar en un Bookafé. Allí será atendido por un colportor en una
atmosfera de paz, podrá abrir un libro y leerlo degustando un buen café.
Ciertamente su fe será alimentada, saldrá más fortalecido para los
desafíos del diario vivir y tendrá más claridad con respecto al
propósito de Dios con el hombre (Génesis 1:26-28; Apocalipsis 5:10).
¡Buen disfrute! Ah, no se olvide de llevar a su familia y amigos.
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